Conocer el estilo de aprendizaje dominante de cada persona nos permite idear estrategias de aprendizaje de acuerdo con la forma particular en que percibimos y procesamos la información.
Las evaluaciones nos permiten identificar áreas de oportunidad para poder diseñar estrategias enfocadas a determinados campos de estudio necesarias para la preparación al examen único para el ingreso al nivel medio superior.